Historia del bulldog inglés: desde sus orígenes hasta la actualidad
Si te encanta esta raza, entonces seguro te causa curiosidad la historia del bulldog inglés. ¿De dónde proviene su nombre? ¿Cuáles son sus orígenes? ¿Desde hace cuánto existe? Bien, estás de suerte, porque en este post te mostraremos la historia del bulldog inglés y su evolución hasta la actualidad.
Origen del bulldog inglés
Aunque se tienen muchas teorías sobre sus orígenes, se sabe con certeza que a mediados del siglo XVI la raza que conocemos hoy como bulldog inglés ya existía, esto se sabe por menciones en cartas de la época. En cuanto al nombre, el término «bulld-dog» está relacionado directamente con su rol, ya que antiguamente se empleaba para controlar al ganado y, en especial, a los toros.
Sobre el bulldog inglés, se ha especulado que pueden ser descendientes del perro Alano (la raza de la cual provienen casi todos los perros europeos), del bulldog español, el mastín inglés, o del cruce del kelb thal gliet (una raza de perro africana) y el perro de toros maltés.
Historia y evolución del bulldog inglés
Si tomamos en cuenta el primer registro de su mención, la raza tiene por lo menos unos 500 años comprobados, pero se especula que podría tener mucho más tiempo.
En 1666, la raza fue clasificada oficialmente por el científico inglés Christoher Merret.
Claro, en aquel momento, el bulldog tenía características muy diferentes a las de ahora, por al bulldog de esa época se le conoce como bulldog inglés antiguo, que era mucho más parecido al boxer.
Con el paso del tiempo, el bulldog inglés antiguo fue convirtiéndose en una raza mucho más robusta y fuerte, ya que se empleaba casi exclusivamente para manejar ganado y para enfrentarlo a toros. Esto también hizo que la raza se hiciera mucho más feroz.
Por si fuera poco, también era una de las razas preferidas en las peleas de perros, muy comunes en la época.
Todo esto contribuyó a que el bulldog inglés antiguo se hiciera toda una reputación por su ferocidad y fuerza, que no solo aplicaba a la perfección contra el ganado y los toros sino contra otros perros.
Por suerte, en 1835, el hostigamiento de toros y ganado y las peleas de perros se prohibieron en Inglaterra, con lo cual terminó de golpe la etapa más complicada de esta raza.
Con el fin de las peleas de perros, y la prohibición del hostigamiento de toros (o bull-baiting, como se le conoce en inglés) el bulldog inglés perdió su rol principal. Sin embargo, fue ganando popularidad como mascota.
Además de eso, al mezclarlo con razas como el pug, fue consiguiendo su clásica apariencia de hocico chato que todos conocemos y amamos en la actualidad.
Y como los días en que eran criados para pelear estaban atrás, sus criadores empezaron a concentrarse en conseguir bulldogs más mansos, dóciles y amigables (aunque es común pensar que el bulldog inglés es agresivo por naturaleza).
Unas décadas después, en 1864, se formó el primer club de bulldogs, el Rockstro Bulldog Club. Pero la organización no tuvo mucha relevancia que digamos.
En 1873, se fundó el Kennel Club, una de las organizaciones más prestigiosas dedicada a la crianza y registro de razas de perros.
Por supuesto, reconoció y registró oficialmente al bulldog inglés en su primer volumen de registro de razas (el Kennel Club Stud Book), presentado en 1874.
Varios años después, el Club Kennel de EEUU también reconocería a la raza.
En la actualidad, el bulldog inglés es una de las razas más populares del mundo (puedes conseguir muchos criadores de bulldog inglés en España y en otras partes del planeta por esa razón). Tanto su temperamento como su apariencia son completamente distintos, y ahora es un perro ideal para las familias y de lo más tranquilo.
Pero eso sí, vaya que tiene historia.
